sábado, 12 de mayo de 2012
C Á P S U L A S 121
Por: J. N. Robles Olarte
LA TEORÍA DE LA EVOLUCIÓN
Definitivamente, la “teoría” de la evolución se puede probar sin que recurramos a las Sagradas Escrituras Hebreas! Ello es posible si somos buenos observadores de nuestro alrededor, de nuestro mundo habitual. Si nos remitimos a lo que se enseña en escuelas, colegios y universidades, veremos que la teoría de Darwin, padre de la “evolución”, veremos que se trata de una explicación basada en lo biológico, de cómo las criaturas supuestamente han evolucionado y se han desarrollado, progresivamente, a través de la selección y variación naturales no por mutaciones. Éstas variaciones se efectuaron con el transcurrir de siglos y siglos, partiendo de una pequeña manifestación celular hasta convertirse en una gran criatura, como las existentes hoy día en nuestro planeta tierra! Eso es lo que han estado tratando hacernos creer los evolucionistas, que no hay necesidad de un Creador para que exista lo que existe en nuestro planeta, y fuera de él.
Con el propósito de recordar puntos cruciales para “desaprobar” tal teoría de darwiniana vamos a exponer sólo cinco aspectos muy relevantes como son: a) los fósiles que son residuos de seres vivientes preservados en muchos lugares de nuestro mundo. Estos se han encontrado tanto en la superficie como en lugares tan profundos que pasan de los 145 metros de profundidad. Uno de esos fósiles más conocidos es la trilobita, una forma de vida marina ya extinta pero que se ha conservado en muchísimos lugares del mundo, constituida de cabeza, cola, cuerpo estriado, y de una longitud promedio de unos 30 centímetros, poseedora de un complejo sistema respiratorio. Se han encontrado, como ya dijimos, tanto en la superficie de algunos lugares, como en profundidades mayores a los 145 metros de profundidad enclavadas en rocas calcáreas, perfectamente conservadas y uniformemente debajo de la capa que se conoce como Cambriana. Estos fósiles no son unicelulares, y se han convertido en un verdadero enigma para los Paleontólogos. Una evidencia muy importante de las muestras fósiles de tales trilobitas es el hecho verídico de que no se han encontrado en esos estratos, descubiertos y estudiados, formas transicionales entre sus especies, y ésta ausencia de transición es una valla insuperable tanto para los teístas evolucionistas, b) la adopción de evolucionistas que consideran que cuando no existe una evidencia real de algo, se inclinan por adoptar suposiciones. Si aquélla fuera cierta, ¿dónde podremos encontrar la evidencia de que un gato, un perro y un caballo tuvieron un origen común ¿ Por esa razón la “evolución” se le llama, “teoría”, algo que se “supone”. c) Existe en la naturaleza, debidamente comprobada, la “ley de la Biogénesis” que nos afirma, y confirma, que “sólo la vida puede producir vida”. Todos sabemos acerca de la pregunta del millón, ¿Qué fue primero, el pollito o el huevo? Ésta pregunta se convierte en un dilema para cualquier evolucionista, ya que el huevo procede de la gallina, y del huevo procede el pollito, y esto se complica más cuando sabemos que para que un huevo sea fértil, debió ser fertilizado por un gallo. Para los creemos en una creación especial y única no existe problema alguno, porque sabemos que el Eterno Creador creó la primera pareja de gallo y gallina para que se pudiere dar un huevo fertilizado, y de allí el pollito, d) Cuando algo que tiene vida necesita de otro ser para preservarse a sí mismo, se le conoce como relación ”simbiótica”. Un buen ejemplo de ello lo vemos en la labor de la abeja común con respecto a una flor cualquiera. Las abejas necesitan, para alimentarse del néctar que producen tales flores; mientras que, a la vez, las flores necesitan de las abejas para que se pueda realizar la polinización que ha de producir semillas según su especie. Vemos de nuevo que los científicos ateos se abocan ante esto con un dilema del cual no tienen respuesta alguna, e) todos los seres vivientes, plantas y animales, fueron planeados y diseñados de una forma exquisita y perfecta. Cualitativamente una bacteria, cualquiera que ella sea, también fue una creación estupenda y majestuosa, para jugar un paapel importante dentro del resto de seres vivientes, al igual que el cuerpo humano que es el diseño y obra más perfecta que se haya creado en todo el cosmos y sus universos! No es un “diseño ilusorio”, como lo califican los evolucionistas, ni tampoco que NADIE lo haya creado, que surgió del caos, de la nada! Es la obra más compleja y perfecta que nuestro Padre y Creador haya podido diseñar y crear. En verdad se necesita más de la estúpida fe, pregonada por Pablo o Saulo, y creer en una ciega evolución que no nos aporta respuesta lógica alguna que creer, por convicción y prueba, que existe, ha existido, y existirá un Creador Supremo que crea y maneja Su creación a la perfección.
GIDEON, UNO DE LOS JUECES DE LA ANTIGUA ISRAEL!
Las leyes físicas de nuestro Creador no permiten que viajemos a través del tiempo para poder comprobar hechos históricos del pasado pero, a pesar de ello, podremos recurrir a las Escrituras Sagradas para constatar más de cerca tales eventos y sus implicaciones en torno a la historia de nuestro género. Entre uno de los personajes más notables tenemos la historia de un profeta llamado GIDEON, de quien podremos aprender acciones y actitudes, y poderlas aplicar, también, en nuestras vidas. Ya sabemos que todo lo que sucede tiene su tiempo y su lugar propicio. Para que ese llamado, de parte de nuestro Creador, se efectúe debe haber un previo llamado. Y ese fue el caso que sucedió con Gideón, uno de los Jueces de Israel, en el Siglo 12 antes de la Era Común o A.C. como hoy día se conoce, cuando el pueblo Hebreo hacia lo que mejor consideraba hacer por la carencia de un Rey propio.
Irónicamente Gideon, cuya historia se narra en el libro de los Jueces, capítulos 6 al 8, fue uno que, a regañadientes, se convirtió en uno de los líderes de su época. Provenía de la población de Gilean, perteneciente a la tribu de Manasés, una de las trece Tribus de Israel, originaria del patriarca José. El clan al que pertenecía, de poca relevancia familiar, no podía comprender el porqué él había sido escogido para tal posición. Fue por ello que le pregunto al ángel del Eterno que se le diese una señal que comprobara su escogencia como tal; y por esa razón brindó al Eterno una ofrenda, sobre unas rocas dispuestas por él para ese efecto. Ofrenda que fue consumida de inmediato por el fuego que hizo generar dicho ángel. Gideon fue escogido para que perpetrara un ataque militar en contra de los Midianitas que estaban oprimiendo, con mucho rencor y sevicia, al pueblo de Israel. Como todo ser humano, incrédulo, deseaba aún más confirmación de su escogencia por parte de nuestro Creador, y Le pidió que le complaciera en que un vellocino de lana de oveja permaneciera seco, y el resto de la tierra mojado, luego del rocío de la noche. Así sucedió; pero no satisfecho con el milagro que se le brindó, solicitó de nuevo al Creador, que el mismo milagro fuese de forma inversa, es decir que el vellocino se llenara del rocío de la noche, y el resto del suelo permaneciera seco. Y así fue¡ Como bien sabemos, nuestro Creador es UNO paciente, que siempre está dispuesto a mostrar al hombre que Él es el Eterno y el Creador Único de todo, y le complació también tal solicitud . Una muestra más de Su amor, de Su paciencia y de Su humildad -- que todos bien deberíamos IMITAR!
Ya seguro de su elevación a ser uno de los Jueces de Israel, aceptó y se propuso a cumplir lo que se le pedía, y constituyó una fuerza militar de más de 32000 hombres. Pero el Eterno consideró que tal número era excesivo para la labor encomendada de vencer a los medianitas y fue así como, de todos ellos, escogió 300 hombres, apenas un 0,938% del ejército, los que “lamieron las aguas como perro”, como el Eterno le había dicho.
De ésta experiencia vivida por Gideon bien podemos comprobar que el Eterno, en algunas oportunidades, no se vale de Su poder y fuerza, sino en escoger a ciertos seres humanos, algunas veces de los más humildes, para que lleven a efecto Sus deseos y propósitos. Es de anotar aquí que la “ambición” natural de cualquier hombre o mujer no es mala per se, sino el mal uso que aquéllos le den a la misma. Una ambición desmedida lleva al ser humano hacia la auto glorificación, a convertirse en un dictador que se inclina a cometer actos nada sanos contra sus congéneres, llevándolo hasta el genocidio. Y ésta NO fue la actitud de Gideon porque él se sometió a lo dispuesto por nuestro Creador en Salmos 75: 6, 7 y 8. Ésta lección, que nos provee el Creador, nos debe servir de pauta para que cuando Él nos llame a Su servicio, sepamos cómo conducirnos obedientemente!
SER Y DEJAR DE SER
Nacemos, vivimos, morimos y, después, nos convertimos en “historia”. Es el ciclo perfecto de todo ser humano, después de haber sido engendrado por sus respectivos padres; acciones que tienen en realidad un propósito dentro del plan de un Creador Único. Nada ha sido creado porque si. Sería una creación ininteligente y carente de propósito. Es un hecho que vivimos en la última etapa de ésta edad de la historia humana que terminará de manera muy espectacular y terrible; todo ello porque no ha habido otra de peores características que la nuestra ha demostrado tener, y que las anteriores que han precedido no tuvieron. La era que le seguirá será una de paz, felicidad y armonía total. Esas son las buenas nuevas, después de la catastrófica debacle que nos espera, a todos los que sigamos el camino indicado en la Sagradas Escrituras expresada en aquéllas por nuestro Único Creador y Salvador, el PADRE ETERNO! Por ello debemos considerar seriamente el estudio de las Sagradas Escrituras, orar a diario porque se haga Su voluntad, y permanecer fieles a Él hasta el final, y solo a Él!
Él lanzará una nueva era para el ser humano en ese Maravilloso Mundo de Mañana! Serán 1000 años, durante los cuales el hombre habrá de aprender el verdadero Camino de nuestro Creador, y los vivirá intensamente. Su centro de actividad será la ciudad de Jerusalém, la ciudad que Él escogió, desde un principio, como Su amada ciudad!
Una descripción maravillosa de ese “nuevo mundo” lo vemos plasmado en el capítulo del libro de Isaías 11, versos 6 al 9. “Y habitará el lobo con el cordero, y el tigre se acostará junto al cabrito; también el becerro y el leoncillo y el cebón andarán juntos; y un niño pequeño los conducirá. Así mismo la vaca y la osa pacerán juntas, y sus críos yacerán juntos; y el león comerá paja al igual que la res vacuna. El niño de pocos años jugará sobre el agujero del áspid, y el recién destetado pondrá su mano sobre la madriguera de la víbora. Nadie obrará mal ni destruirá en todo Mi Santo Monte, porque la tierra estará llena del conocimiento del Eterno Creador, así como las aguas cubren los mares.”
La anterior descripción, cierta, verídica, y aportada por Él hace más de 2700 a Isaías, será una manifestación del Poder y Sabiduría de nuestro Creador para señalarnos que Él, y sólo Él, es, ha sido, y será el Creador y el Salvador único de todo el género humano. Vemos, en los versos anteriores, cómo el Eterno cambiará la naturaleza y el sistema digestivo de los animales que hoy son cazadores y carnívoros. Y es el momento oportuno para aclarar que cuando el Eterno creó los animales, los creó para que consumieran hierba como lo hacen la vaca, el conejo y otros más; naturaleza que cambió debido a la desobediencia de nuestros padres Adán y Eva, en aquélla desgraciada ocasión que tanto daño le ha sabido causar al género humano, por acción y comisión de las “intrigas” de su gran enemiga, Heylel, Lucero, o Satanás!
El conocimiento del Eterno Creador, dado a Su pueblo desde Su Santo Monte, ubicado en Jerusalém, llegará a todo el mundo. La verdad, Su verdad, prevalecerá y será entendida por TODO EL MUNDO. Y es por ello que Él, ahora, está buscando personas portadoras y amadoras de la paz y de la verdad, no importa que sean jóvenes o ancianos, que Le adoren para sirvan a la humanidad toda en ese ya próximo MARAVILLOSO MUNDO DE MAÑANA.
NUESTRAS ENFERMEDADES
Hoy día caemos enfermos y morimos debido a un ataque al corazón y otros de cáncer; muchos son los que sufren de reumatismo, artritis, diabetes, enfermedades de los riñones, anemia, gripes, bipolaridad, y otras enfermedades mentales, Respondemos muy bien a la propaganda de los fabricantes de pastas dentales, de cepillos para aplicarlos pero, aún así, nuestros dientes se dañan y los perdemos a edad muy temprana.
Hoy día la mala sobrealimentación es rampante en todo el mundo a pesar de los “progresos” que hemos logrados en fabricarlos. Por otra parte, existen lugares en nuestro planeta donde los alimentos son escasos a tal punto que la desnutrición y muerte, debido a ello, es tan dolorosa como abundante, sobre todo en la población infantil y de ancianos. La hambruna es rampante en muchos países que llamamos del “tercer mundo” y aún, aunque no lo creamos, en naciones de gran progreso industrial. Con todo ello podemos afirmar que el “ser humano” NO es tan inteligente como se afirma. Somos tan orgullosos y narcisistas que hemos echado a un lado todas las enseñanzas que el Creador del cosmos y sus universos estableció para que ello no sucediera. Él creó la tierra para que se cultivase de acuerdo a Sus principios y concejos: dejar que la tierra descansara cada séptimo año para que la misma se recuperara, y ello no se ha aplicado en razón que el hombre ha pensado que sabe más que nuestro Hacedor. De allí que los alimentos como el trigo, el arroz, la cebada, los pimientos, cebollas, lechugas, repollos, zanahorias y demás verduras y frutas no provean los elementos minerales y vitaminas nutritivas necesarios para una salud perfecta del ser humano. Todo ello, por esa inclinación maligna, de pensar sólo en el obtener lo más posible para satisfacer su ego. Con esa actitud lo que hemos hecho es que proliferen una cantidad de laboratorios que proveen “vitaminas” de toda índole que, en sí mismas, no son sino pura basura. Debemos entonces preguntarnos ¿quién, en verdad, es un ser inteligente, el Eterno, creador de todo, o el hombre? Por los resultados que testimonian la mala salud y tantas enfermedades que vemos a nuestro alrededor, la respuesta es sola una: “El único ser inteligente es nuestro Eterno, el Altísimo de Israel!” Él, el Soberano, que provee todo alimento perfecto y apto para cualquier ser viviente, género humano, animales y plantas. De ninguna manera puede ser el hombre quien ha demostrado, una y otra vez, su necedad, su orgullo y deseo desmedido de ganancias, más lujos y facilidades, que lo han desviado del Camino que Él nos depositó en Su Palabra, las Sagradas Escrituras Hebreas.
REVIVIFICACIÓN ESPIRITUAL
Una revivificación espiritual es de vital importancia para todo el mundo en razón de las características catastróficas en la que nuestro mundo se ha sumido, y en donde todos lo valores morales y éticos se han perdido debido a nuestra desobediencia a las Leyes naturales expuestas por nuestro Creador en Su palabra- Como nación debiéramos promover un día nacional de oración y solicitud de perdón al Creador de todo. Estamos en deuda con Él porque nos hemos desviado de las enseñanzas que por siglos y siglos han permanecido sin escrutar, contenidas en las Sagradas Escrituras Hebreas, por nuestro pueblo y por las instituciones religiosas que nos ahogan con sus falsas enseñanzas. Se preguntaran si una revivificación espiritual pudiese ayudar a nuestra nación y a otras más que conforman el mundo. La respuesta es positiva, rotundamente positiva, porque ello nos evitaría el castigo que Él tiene dispuesto para “aquéllos días”, que ya están dispuestos y cercanos, expresados en Su Palabra, el Manual Instructivo que hemos desechado por seguir tras religiones que no tienen temor alguno al Creador Único del Cosmos y sus Universos. Tengamos por seguro que TODAS las religiones han sido de creación humana, exclusivamente. Se han valido de algunas enseñanzas de las Escrituras si, pero las han contaminado con sus ideas carnales de lo que es Él y Su poder. La mentira se ha institucionalizado en todo el mundo; y nuestro país no ha sido excepción de ello! Se ha dicho, y se dice aún, que la religión oficial que nuestro gobierno ha pautado con el Papado de Roma es la que se debe practicar. Además de ella han surgido una serie de religiones e iglesias ajenas a la primera que han estado conquistando adeptos para su propio beneficio y el de los que las dirigen en detrimento de sus “fieles corderos” que como tales diezman sus ingresos para dárselos a esa cantidad de vividores y falsos ministros, cuando ello no es legal ante los ojos de nuestro Creador puesto que no existe aún un verdadero sacerdocio Levítico. Han olvidado que el ministerio original de enseñar y guiar al pueblo del Creador se le otorgó exclusivamente a la Tribu de Leví, de quienes surgieron el sacerdocio Aaronista y sus servidores en el Templo que, hoy día, no existen. En ninguna parte de las Sagradas Escrituras podremos encontrar una escritura donde se autorice para tales servicios a otro pueblo que no sea el Levítico. Los que hoy día sugieren que lo son, y lo ejercen, están mintiendo absolutamente!
En verdad nuestra nación, y el mundo todo, están en problemas. Nosotros mismos también nos encaramos con problemas de toda índole. Nuestros políticos están más interesados en sus intereses personales que en los del pueblo en general. Nuestros estudiantes, y muchos profesionales, están sumidos en deudas que no saben cómo pagar. Nuestros hogares se han desvanecidos, cada quien anda por su lado e intereses. Los valores morales ya no son como antes, absolutos! No, ahora son valores relativos, y sometidos a las inclinaciones nada sanas y éticas de cada quien que las ejercen y práctican. Vivimos en una debacle moral, económica, institucional, profesional, y de valores racionales. Nuestro sistema educativo se ha degenerado tanto que, hoy día, no se sabe quién es el profesor, o quién es el alumno. Los hijos no respetan, como debe ser, a sus padres. Hoy día quienes ponen las pautas, en sus hogares, son los hijos e hijas; los padres se ha relegado a un papel de segundo plano. Es por todo ello que nuestra nación, y las demás del mundo, necesitan de una revivificación espiritual y de valores éticos y morales para que no tengamos que sufrir los eventos ciertos que pronto se han de generar en éste planeta tierra. Nuestro planeta está en problemas. Nuestro continente está en problemas, y nuestra nación tampoco se libera de ellos. Personalmente también estamos mal desde muchos aspectos, salud, bienestar físico, paz mental, tranquilidad financiera. No sabemos con certeza donde dirigirnos y poder encontrar las soluciones que tan urgentemente necesitamos. Las religiones de factura humana han fracasado dolorosamente en su intento egoísta de ofrecer paz y felicidad al género humano, a pesar que sus “evangelistas” han estado viajando de un lugar a otro para “adoctrinarlos”, en nombre de dioses falsos que en las Escrituras Hebreas no se nombran o mencionan. Ésta vivificación espiritual se debe centrar en el ETERNO CREADOR, y no en el hombre de Galilea u otro “dios falso” quienes no ha servido de nada para nuestra tranquilidad, o en las prácticas políticas y religiosas que nuestra humanidad ha experimentado en todos éstos siglos pasados. Este cambio se debe centrar en uno radical, cual es el pensar y accionar racional, de un vivir de acorde a los principios que nuestro Creador tiene consignado en Su Palabra, las Sagradas Escrituras Hebreas, o como la conoce el mundo, Antiguo Testamento. Se necesitan, púes, de discípulos que acepten y vivan de tales principios vitales allí consignados. Un discípulo, o estudiante, es uno que desea ser como su maestro, su Creador. Para llegar a serlo debemos someternos a Sus enseñanzas y vencer nuestra naturaleza que es proclive a inclinarse a las insinuaciones de nuestra enemiga Heylel, Luzbel o Satanás.
NUESTRA CAPACIDAD DE RAZONAR
Definitivamente nuestra capacidad de razonar como la de transmitir conocimiento está limitada a los canales perceptivos de nuestros cinco sentidos, y por ello no podemos admitir que haya “algo” superior a nuestra mente. Hago alusión a lo anterior porque, en un programa educativo que se transmitía por la radio de una universidad local se le preguntaba a un científico norteamericano el porqué en la reproducción de las bacterias y otros cuerpos microscópicos no podía existir más de un género de los que conocemos, masculino y femenino. En lo personal me llamó la atención el hecho que todo un intelectual nuestro hiciese tal pregunta. El entrevistado se apresuró a responder que tal pregunta era una muy difícil de responde. Claro que sí. Una buena respuesta y una buena salida a su propia ignorancia al respecto. En nuestro contorno lo que podemos constatar, entre muchas cosas es, luz y oscuridad, calor y frio, sur y norte, pasado y presente, dulce y agrio, bueno y malo, nacer y morir, blanco y negro, agua y vapor, felicidad y tristeza, grande y pequeño, micro y macro, macho y hembra y otra plétora de diferencias que van en dúo, un dúo que se puede considerar infinito conforme vayamos explorando el contorno que nos rodea. En la media que podamos ascender los cielos, podremos observar cuerpos celestiales que tienen su propia órbita, una de la que no se pueden desplazar de la que se le indicó tener en su creación inteligente. He aquí también, en todo su esplendor el cosmos de muchos universos, con sus propios soles, sus nébulas y galaxias. Sí, todos esos cuerpos celestiales, una vez creados por “alguien”, se mantienen en un lugar específico, determinado, dentro del plan provisto e ideado por ese “ser superior”, que los trajo a la existencia con un propósito- Más aún, los trajo de la “nada” que el hombre no ha podido descubrir, desentrañar, el “principio vital de lo que conocemos como materia”! Estos cuerpos celestiales son cuerpos inanimados. No tienen mente, carecen de inteligencia alguna. No pueden hacer lo que nosotros los humanos podemos hacer—pensar, razonar, planear y llevar a efecto planes de acuerdo a un deseo y volición propios. Son, como ya dijimos antes, cuerpos celestiales inanimados, que se pueden mover en su órbita por una “orden superior” provenientes de un “ser superior”, en un lugar celestial específico que no pueden cambiar per se. De otra parte, la mente humana bien puede pensar, razonar, planear y llevar a efecto lo que se propone, previo a su ejecución. Puede inventar y producir instrumentos con los que puede adquirir más conocimiento, no solo aquí en nuestro planeta tierra, sino en el vasto universo como bien lo ha estado haciendo durante muchas décadas en el pasado. Al crear y desarrollar naves espaciales y computadoras, al hombre le ha sido posible enviar astronautas a la luna, y naves investigadoras al espacio más lejano posible de nuestra galaxia. El hombre ha aprendido cómo liberar energía del átomo, y utilizar su poder como para destruir toda clase de vida en la tierra. Ha aprendido a cambiar el cauce de los ríos, y valerse del poder de esa misma agua para obtener energía eléctrica. El hombre bien puede tomar de los materiales existentes en nuestro planeta y construir con ellos, casas, rascacielos, avenidas, autopistas, etc. De forma relativa el automóvil que hoy nos transporta, se puede decir que es un objeto viviente, al igual que los robots que aceptan órdenes de la propia voz de su autor y creador. Pero ellos actúan por órdenes predeterminadas. Aún así, ¿podemos creer que todo esto ha venido a ser por una mera casualidad del azar y del tiempo? Se necesita carecer de tres dedos de frente para responder afirmativamente. Eso mismo sucede con todo lo que vemos a nuestro alrededor, que fue creado en “un principio”, cuando llegamos a tener conciencia de saber que existíamos; ser uno, especial y único, en éste mundo material!
No hay duda alguna que para todo ello debió existir un CREADOR, UNO superior a nosotros mismos. Ese “alguien” no es otro que el ETERNO CREADOR, el ALTÍSIMO DE ISRAEL, el SOBERANO de todo lo creado y quien AÚN está creando!
Todo escéptico que se permita observar el vasto cielo que nos cubre notará que allí funciona un Grande y Maestro Reloj Celestial que mantiene en perfecta función armónica todos y cada uno de los cuerpos celestiales que allí se encuentran. Ello nos demuestra la falencia que nuestras obras, entre ellas nuestro reloj común y corriente, tienen ante las de nuestro Creador, que son perfectas e inamovibles en el tiempo. Con todo, no podemos decir que ello sucedió por azar, por propia volición, que no necesitó de un autor, que no hubo un Gran Diseñador, ni una Mente Maestra que lo planeara e hiciese, que pusiese cada estrella en su lugar donde ha estado y permanecerá. Son miríadas de ellas que allí se encuentran, manifestando la gloriosa obra maestra de AQUÉL que el mundo no quiere admitir como autor único, dándole la gloria, como se la dan, a un hombre nacido de mujer virgen, el Hombre de Galilea. Es tanta la precisión de los movimientos planetarios que nos piden a UNO que los haya creado con Su inteligencia maravillosa e inacabable. Y de ellos está lleno nuestro mundo científico. Es cierto que “sólo un tonto puede decir en su corazón que no existe Soberano alguno” (Salmos 14:1 y 53:1
Si nosotros mismos nos miramos de cuan inteligente somos, que podemos planear y ejecutar cualquier obra que no sea el de crear vida vegetal, animal o humana, veremos que nuestros poderes y creatividad están limitadas a lo que ese Gran Creador ha dispuesto que podemos hacer. Lo que si hemos estado haciendo es el de contaminar toda “obra buena” que Él ha hecho en ésta nuestra tierra, alterando el ADN y la genética de lo que Él, en una primera y única oportunidad, hizo que fuese y existiese, dañando y deformando las maravillosas y perfectas obras de nuestro Creador; y dejándole a Él en un plano meramente físico y finito, dudando con testarudez su existencia como tal, como el Más Sabio y Poderoso de los seres que jamás hayan podido existir. Con ello, no hemos demostrado sino que nuestro proceso racional y sincero de buscar la verdad se ha sumido en uno de torpes consecuencias: la ignorancia total y absoluta de que es imprescindible SU existencia para que sea una realidad todo lo que existe! Finalmente todo escéptico, hostil y prejuiciado, seguirá oponiéndose a la verdad que no acepta, ni entiende, porque no puede comprobar con su sabiduría finita y limitada la existencia real de ese ÚNICO SOBERANO Y ETERNO CREADOR. Pero primará la voluntad de Él sobre todos los conceptos e ideas que el hombre se ha forjado en su trasegar por éste planeta; y Él “se magnificará a Sí Mismo…y llegarán todos a conocer que Él es ese ETERNO” (Ezequiel 38:23). Único, Salvador, y Redentor!
LA ENSEÑANZA DE LAS SAGRADAS ESCRITURAS HEBREAS
Muchos son los mitos que se enseñan y se han creído en toda la historia del ser humano, enseñados y transmitidos por las iglesias del mundo. Entre ellos está la idea de que el Antiguo Testamento o, más exactamente, las Sagradas Escrituras Hebreas hacen alusión al “Nuevo Testamento” que se ha adicionado a lo que conocemos, corrientemente, como la BIBLIA. No es nada raro que muchos se hayan “tragado” esa mentira, pero el hecho es que en aquélla no se habla nada acerca de que se ha “de levantar de la tumba un salvador”, que “habrá de nacer de una virgen”, que “ese salvador es el Mesías”, o que “es el primogénito del Padre, Soberano y Creador”. Cuando leemos las declaraciones de Moisés en el libro del Deuteronomio, capítulo 32, versos 1 al 5, las mismas no son sino las palabras dadas a aquél por el Soberano del Antiguo Testamento; palabras dirigidas específicamente al pueblo Hebreo a quien Él es cogió como Suyo propio, según consta en Éxodo 4:22. No existe escritura alguna que manifieste y afirme que nuestro salvador provendrá de una virgen. No olvidemos que la mujer fue una creación de Él, partiendo del cuerpo del primer hombre, Adán, y que nuestro Creador formó de la tierra con Su magnífico poder. En las Sagradas Escrituras Hebreas tenemos pruebas contundentes que nos demuestran que nuestro SALVADOR no es el Mashiach o Mesía porque, es ciertamente verídico, que aquél quien hace levantar de la tumba al Mashiach es el mismo Creador, nuestro Eterno Padre; y ese no es otro que el Rey David vuelto, de nuevo, a la vida! Atrévase a confirmarlo por usted mismo leyendo a Salmos106:21; Isaías 41:13-14, 43:1-3, 11-12, 25-26; Isaías 45:15, 21; 47:4; 49:26; 54.5; 60:16, y 63:8; Jeremías 14:7-8, y Hoséas 13:4, entre otros. En Isaías 43:11 al 12, podemos leer “! Yo, Yo Soy el Eterno, y fuera de Mi no hay otro SALVADOR¡ Yo lo anuncié, y salvé, y lo hice oír, y no hubo otro dios extraño entre vosotros; vosotros, pues, sois Mis testigos, digo Yo, vuestro Creador! “ ¿Quien puede hablar con esa seguridad sino nuestro Creador? Y cuando Él habla, se dirige a Su pueblo, al pueblo hebreo, y no a las naciones gentiles que no Le conocen! Allí afirma que Él es el ÚNICO, el SALVADOR y CREADOR de todo el género humano, de todo el cosmos y sus universos! Invitamos a todo lector desprevenido y sin prejuicio alguno a que se nos compruebe, con las Sagradas Escrituras en mano, todo lo contrario. Leamos y aprendamos de las palabras que podemos encontrar en el libro de Josué, capítulo 24, versos 14 al 15, “Ahora, pues, temed al Eterno Creador, y servidle a Él con SINCERIDAD y en VERDAD; y DESECHAD a los dioses a quienes han servido vuestros padres, al otro lado del río Éufrates, y en Egipto. Y servid sólo al Eterno vuestro Creador. Y si os parece mal servir al creador, escogeos hoy a quien debáis servir, si a los dioses que sirvieron vuestros padres que habitaban más allá del río Éufrates, o a los dioses de los Emoritas en cuya tierra habitáis ahora;..”. Lo anterior se refiere el lugar originario de Abraham antes de haber sido escogido por el mismo Creador para la labor que efectuó con fidelidad original, durante toda su vida: La tierra de UR, en Mesopotamia. ¡Habéis sido advertidos¡ Vuestra propia sangre esta sobre vuestras cabezas¡ Escoged, pues, lo correcto para la salvación eterna! Digamos, pues, como Josué, “en cuanto a mí, y a mi casa, serviremos al Eterno Creador, el Soberano de Israel.
CONCEPTO DE QUIEN ES EL CREADOR
El tiempo transcurrido en cualquiera de las organizaciones religiosas de este mundo, cristianas o no cristianas, han influido grandemente en la concepción que se tiene con respecto a un Ser Superior, Creador y Sustentador de todo lo creado. Es por ello que no podemos encontrar una unicidad de concepto con respecto a ese SER SUPERIOR, y se le llama con diferentes nombres. Ninguno de ellos el verdadero! En el Hebreo, lengua en la cual se escribió lo que conocemos como Sagradas Escrituras Hebreas, o Antiguo Testamento, las vocales no se escriben, sino más bien se señalan con ciertos signos, de puntos y pequeñas líneas, que se anotan debajo de las letras hebreas. Por esa razón, y una de las principales, no podemos transcribir el sonido de las mismas al traducir aquéllas a cualquier otro idioma diferente al hebreo. Mal se podría entonces decir cuál sería el sonido del Tetragrámaton , o cuatro letras, que constituyen el Nombre del Eterno Creador, YHWH. Adicional a lo anterior existe el concepto errado que Él es UNO que exige y pide sacrificios de animales limpios como un becerro, toro, oveja, carnero, cualquier otro animal limpio o. finalmente el hombre mismo, para saciar su sed de sangre y calmar Su ira santa! Nada de ello podremos encontrar en ninguna parte de en Su Manual Instructivo cual es la que conocemos como Sagradas Escrituras Hebreas -entre otras cosas fue dictado y escrito específicamente para el pueblo que el Creador escogió para Su servicio, el pueblo Hebreo o, en su defecto, para el pueblo de Israel- y que el mundo se le ha dado en llamar para devaluarla Antiguo Testamento. Nuestro Creador y ÚNICO Salvador está interesado sólo en los seres humanos, hechos a Su imagen y semejanza… para que podamos llegar a tener un corazón humilde y contrito. Para ello se necesita tener un deseo sincero de arrepentimiento desde lo más profundo de nuestro ser, de nuestros corazones, por la sencilla razón que cuando pecamos -fallamos en nuestro hacer, actuar y vivir- estamos pecando contra Él. ¡Todo pecado es contra él, y sólo contra Él¡
Leamos Salmos 51 para que aprendamos cómo el Rey David derramó su corazón ante el Todopoderoso de Israel para que se le perdonase su pecado, y cómo obtuvo Su perdón. Si hubiese sido necesaria la sangre de “un hijo de dios” para que el Eterno le perdonara a David rey los pecados cometidos, aún estaría en sus pecados, a éstas alturas. Observemos bien, los pecados le fueron perdonados por el mismo Eterno Creador, y no existía, aún, ese falso clamor de un “hijo de dios”. Agreguemos a lo anterior el hecho de que SI el Creador pensó en alguna oportunidad enviar a “Su hijo” para que muriera vicariamente por los pecados del género humano, hubiese dejado un espacio, en Su Manual Instructivo, para darnos esa información. Y no lo hizo; porque ello no es necesario. Nuestro Creador, el Soberano de Israel, es el único Redentor y Salvador de la humanidad porque Él, y sólo Él, es el CREADOR absoluto de TODO! No existe otro fuera de ÉL!
ÉXODO 19:1 al 6
El Eterno sacó a los hijos de Israel de Egipto con un solo propósito, que estuvieran cerca de Él. Esto es lo más importante para el ser humano – estar cerca del Eterno.
¿Para qué el Eterno hizo todos los prodigios y milagros en Egipto? Para traer al pueblo a él. ¿Para qué dividió el Mar de Cañas y llevó el pueblo al desierto? Para traer al pueblo a él. ¿Para qué enseñó al pueblo todas las leyes de un comportamiento recto y santo? Para traer al pueblo a él. ¿Para qué constituyó la nación de Israel? Para tener un pueblo cercano a él.
La intimidad con el Eterno es lo más importante en la vida. No importa si tienes dinero, amigos, prosperidad y felicidad en este mundo, si no has desarrollado una intimidad con el Eterno, para nada sirve todo lo demás.
El hombre fue creado no sólo para vivir para el Eterno sino también para vivir con Él. Si no vives cerca de él y si no has experimentado de manera concreta en tu interior su presencia, debes buscarlo con todo tu corazón, estando dispuesto a sacrificar todo lo que tienes con el fin de conseguir lo más importante en la vida – intimidad con el Eterno.
Las Promesas de un Creador Único y Maravilloso para Su pueblo!
A todo lo largo de las Sagradas Escrituras Hebreas, o Antiguo Testamento, nos encontramos con un reiterado anuncio de REDENCIÓN de un pueblo, especialmente escogido para ello, por parte del Creador del Cosmos. Surge por ello la pregunta lógica que, si esto es así, por qué razón se habla de sólo un pueblo, cuando son en verdad muchos los que existen, y han existido en éste planeta tierra. Nada más cierto es el hecho que la misma historia del mundo, y sus naciones, son una prueba fehaciente que ese Creador, después de haber creado todo el género humano, escogió entre todas ellas a un pueblo para que jugase el papel ejemplar de MODELO para que las otras siguieran Sus instrucciones porque no todas se habían inclinado a seguir las prescripciones morales y éticas originales; por ello se decidió a escoger UNA, para ese propósito. Lo que ese Creador sinceramente deseó y desea es el de proveer la felicidad y bienestar de toda Su creación y más tarde, luego que hayan seguido fielmente Sus instrucciones, hacerlos semejantes a Él, en lo espiritual. Todo ello necesitaba de un LIBRO en el cual se diese testimonio de toda la historia de Su propósito y la de Su creación. Es así como hoy contamos con uno que bien hemos llamado la Biblia; una colección de diferentes libros instructivos e históricos en donde se da testimonio de Su propia existencia eterna y Su propósito en y para el mundo natural y físico nuestro. Tal libro fue escrito para ese Su pueblo, el pueblo Hebreo, que hoy conocemos como ISRAEL, porque ha sido precioso y honorable ante Sus ojos y lo ama (Isaías 43:4). Como Creador absoluto de todo, Él creó a Jacob para ese gran propósito (Éxodo 4:22 e Isaías 43:1), a quien más tarde le cambió su nombre original por el de Israel, y así ha permanecido.
En los primeros cinco libros de ese Manual Instructivo encontramos todas las leyes y prescripciones para el buen vivir de acuerdo a Él y, con posterioridad, siguen otros donde se narra la historia de esa creación humana y su actuar. Todo esto para que permanezca una memoria de la conducta de ellos, y las consecuencias, buenas y malas, de su actuar en ésta vida física. Permanentemente nos está recordado que Él es nuestro Creador, el Santo de Israel, nuestro Salvador y Redentor único; creación que formó para Sí mismo, para que pudiésemos contar Sus alabanzas y afirmarnos que Él es el único que puede borrar nuestras transgresiones, nuestros pecados! (Isaías 43:4,11,21). Es nuestro deber y obligación saber que Él nos creó para Sí mismo, como también que hemos fallado en invocarlo como tal, manifestando con ello que nos hemos cansado de Su presencia en nuestras vidas (Isaías 43:21,23) A pesar de todos nuestros desplantes para con Él, nos manifiesta que Yo, Yo soy aquél que borro vuestras transgresiones a cusa de Mi mismo, y que, habido el arrepentimiento respectivo, nos habrá de perdonar, y no se acordará más de nuestras transgresiones(Isaías 43:25). Él mismo nos recuerda que somos Sus testigos y siervos a quienes ha escogido para que lo sepamos, para que seamos un modelo a las demás naciones, y creamos y entendamos que Él sólo es el Creador y que no hay otro fuera de Él, que no ha habido otro fuera de Él a quien podamos llamar creador o padre; que es nuestro único Salvador (Isaías 43:10.11). Ha sido Él quien nos lo ha anunciado, quien ha salvado a nuestros Patriarcas y padres de la antigüedad, y quien salvará a Su pueblo y al resto de las naciones conforme a Su voluntad y deseo y que, en una oportunidad, envió a Su pueblo a Babel como castigo por su continuada desobediencia- Nuestra historia como pueblo no ha sido la más ejemplar pero, a pesar de ello y en razón del amor y misericordia manifiesta por nuestro Creador para con Su creación, nos promete que llegará el día cuando todo lo pasado sea historia y no recordemos más nuestras trasgresiones. Habrá de llegar el día cuando nos proveerá de caminos en el desierto, de ríos en los yermos para que beba Su pueblo Israel, el escogido; y las fieras del campo como chacales y leones, y avestruces Le brinden honra. (Isaías 43:20)
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