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COMPRENDIENDO NUESTRO POTENCIAL A TRAVÉS DE LA GENEALOGIA

Por :
Dr. Charles B. Abraham

Este artículo es para tratar de hacer popular un tratado matemático que he escrito sobre la genealogía Judía. En la primera parte del mismo nos concentraremos en establecer algunos hechos matemáticos e históricos, y en la segunda intentaremos comprender lo que ello implica para nosotros, personalmente, en nuestras vidas – tanto en lo individual como en lo nacional.
Por allá en 1998 un amigo muy querido me preguntó, “Yaakov, cuál es la probabilidad de que todos los Judíos puedan descender del Rey David?” Y yo, a su vez, le pregunté, “Quieres decir con ello que desciendan vía paterna. o también deseas considerar la posibilidad de una descendencia vía materna? ” Me respondió que incluyera también a la madre.

UNA DESCRIPCIÓN DE HECHOS HISTÓRICOS Y ESTADÍSTICOS.

El Rey David fue un miembro de la tribu de Judá (Yehudah) . Pero sus esposas pudieron perfectamente provenir de de cualquier otra tribu o, para cualquier otro efecto, pudo haber sido una conversa. Creo que una de sus esposas fue una yafeh to´ar, es decir, una cautiva de guerra quien más tarde se convirtió al Judaísmo. Así las cosas, un Levita o Cohen, de hoy día, bien podría ser un descendiente del Rey David, aunque no necesariamente un descendiente vía paterna.
Los cómputos matemáticos son complicados y tediosos, pero los resultados que se obtienen de tales análisis son fascinantes. Todo Judío de hoy día es un descendiente de cualquier Judío que vivió en los tiempos Bíblicos - en tanto que tal persona haya tenido hijos y sus descendientes no hayan sido destruidos completamente en el pasado, es decir, dentro de un término de dos a tres generaciones. Después de ello bien podría ser virtualmente imposible destruir cualquier descendiente del mismo
En realidad ,y aún bajo la suposición de que existiese una “unión casual” (esto es sólo una afirmación estadística y no se quiere decir con ello que sea una mala conducta contraria a la moral Judía, que el Eterno prohíbe) y significando con ello que no existen grupos cerrados dentro de la población Judía, de que sólo se casan entre ellos, y también asumiendo que los Judíos vivieron en áreas geográficas contiguas sin ninguna clase de barreras para casarse entre ellos mismos, se tomaría tan solo unos 680 años para tener la certeza en un 99.99999% de que todo Judío puede descender del Rey David. Tal porcentaje nunca será exactamente el 100%, pero después de 3000 años es al menos cierto en un 99.99999% que los Judíos de hoy son sus descendientes dentro de esos 16 millones de números 9, como decimales. (Me cansé, por cierto, en rastrear una fórmula más que me diese l6000 hileras a todo lo largo de una hoja de papel) . Así que, para un propósito práctico, lo anterior es una certeza en un 100% de que todos los Judíos descienden del Rey David.
No sólo ello, sino que se toma cerca de unos 800 años para que todo el mundo tenga las habilidad de poder afirmar que desciende de él (de David) en tanto que no existen barreras físicas para que pudiesen casar entre ellos. Sin embargo aquí esa consideración es posible que tenga algunas violaciones. Es conocido el hecho de que el Rey David no tuvo descendencia a través de su hijo Salomón con la Reina Sheba, y que toda la realeza Europea es considerada un producto de esa unión. Mas sin embargo es posible que existan tribus de esquimales y otras más aborígenes, que nunca se cruzaron entre si, y que si recibieron sus genes. La totalidad del pueblo Judío vivió en Israel y después de una limitada diáspora residieron en babilonia y Persia por el término de de 1500 años, antes que se dispersaran en Europa y, eventualmente, en América. Ello fue lo suficientemente prolongado para que sus genes se proliferaran entre todo el pueblo Judío.
Usted bien podría objetar y considerar falso la idea de una “unión casual”. Los hijos del rey ciertamente que no se casarían con las aguadoras Chaimie, lo cual es cierto. Sin embargo el Príncipe Heredero de la corona, aquél que sería el próximo rey, podía retener el estatus más alto en el tiempo. Eventualmente los hijos más jóvenes se convertirían en plebeyos, después de muchas generaciones. El Rey David vivió, aproximadamente, hace 105 generaciones. Con el paso del tiempo la suposición de una “unión casual” viene a convertirse en una realidad.

¿CUANTOS BISABUELOS TIENE USTED?

Todos nosotros tenemos dos padres y cuatro abuelos, ya sea que estén aún vivos o no. Tenemos 8 bisabuelos y 16 tatarabuelos. Si los parientes no se casaron con parientes, podríamos tener 2n de abuelos. Y puesto que el Rey David vivió aproximadamente hace unas 105 generaciones atrás, usted bien podría tener entonces unos 2105 abuelos. El problema con éste análisis es que 2105 = 4 x 1031, y allí no pudo haber más que 108 Judíos en el planeta y, ciertamente, no más de 109.
Si usted se casara con su primo de primer grado, sus hijos podrían tener 4 abuelos, pero 2 de cada uno de los 8 bisabuelos se duplicarían, es decir, sus hijos podrían tener sólo 6 bisabuelos. Si por otro lado, se casara con su primo de segundo grado, la duplicación de los parientes podrían sucederse una generación anterior, pero el principio es el mismo.
Así que usted no tiene 1031 tatarabuelos. (Para simplificar las cosas, de ahora en adelante sólo usaremos los términos abuelo y nieto). Hace 3000 años, y a causa de que aquellas 105 generaciones, la mayoría de las personas que se casaron entre si fueron parientes –primos de primer grado, de segundo grado, de tercer grado y de décimo grado que una vez fueron cambiados. Mas sin embargo cada uno de los 6 a 10 millones de Judíos de hace más de 3000 años atrás, son sus/mis abuelos .

CONCLUSIONES ESTADÍSTICAS

Mi análisis estadístico incluyó una gran adición de conversos al pueblo Judío. Las conclusiones permanecen estables. Todos nosotros somos bisnietos del Rey David, Moisés, Aarón, Josué, Isaías y de todos aquellos reyes, profetas y sabios del pasado. Mas sin embargo también debemos considerar el hecho de que podemos ser nietos de Ahitophel, Doeg y de una variedad de malhechores de esa misma época.
Si ello es así, entonces ¿éste análisis de nuestro pasado se convierte en algo sin importancia? No en realidad! En el parshat Yitro y citado en Éxodo 20:5-6, el Eterno afirma que Él castigará a todos aquéllos que continúen pecando, al igual que a sus padres, hasta la cuarta generación, pero que recompensará a todos aquéllos que Le amen hasta la décima generación. Este concepto se repite, de igual forma, en los 13 Atributos de Misericordia de los que hablan en el parhat Ki Tisen y que Éxodo 34:7 hace referencia.
Así que el z´chut Avot (mérito de nuestros ancestros justos) tiene validés en la actualidad y está allí para ayudar, hoy día, si es que seguimos en Sus pasos, mientras que el mal se detiene después de cuatro generaciones, por lo menos. Esto parecería una “violación” del libre albedrío que el Eterno a puesto a nuestro servicio.

¿QUÉ SIGNIFICA ESTO?
Las implicaciones de éstos hechos son profundas – tanto que podría, fácilmente, escribir docenas y docenas de páginas. Pero esto se trata sólo de un corto artículo así que vamos a ceñirnos a unas pocas e importantes implicaciones.
La primera de ellas es que todos nosotros somos hijos de la realeza. Todos sabemos que somos hijos de Abraham, Isaac, y Jacob. Fue una novedad el descubrir que el Rey David, el dulce cantor de Israel, el Rey Guerrero, el prototipo/tzaddik ba´al tshuvah y progenitor del Mesías es su/mi abuelo. No solo de forma figurativa sino literal. Tenemos también la sangre de todo el panorama de la historia Judía corriendo entre nuestras venas.
Así como cada Judío de hace 1000 o más años, fue su bisabuelo/bisabuela, también así cada Judío de 1000 años en el futuro vendrá a ser su bisnieto/bisnieta. Todos somos progenitores del pueblo Judío que habrá de ser. ¿Qué clase de nación desea usted procrear como hombre o mujer – una nación maravillosa o una mediocre tras el matrimonio efectuado entre parientes o con personas de razas diferentes? Cada uno de nosotros tiene la oportunidad de llegar a ser un Abraham o una Sarah
El Rambam nos dice que debemos considerar nuestro próximo pecado o misvah. (El Eterno lo prohíbe) porque el mismo inclinará todo el mundo al mérito o la culpabilidad. Ello suena bien, pero yo he tenido dificult6ad en saber considerar, de todo corazón, lo anterior como para poder hallar una verdadera diferencia en lo que se refiere a mi modo de actuar – al menos de forma consistente.
Uno de mi más grandes enemigos es la familiaridad que tengo conmigo mismo. Yo simplemente evidencio el viejo Yaakov con sus fortalezas, debilidades, y la mayoría de los mismos viejos defectos de los 53 años que tuve cuando estaba en mis años veinte. ¿Quién soy yo para soñar en grandezas? ¿No he tenido acaso una limitada dosis de humildad en mi vida?
Pero yo soy el bisnieto de todo rey y profeta de Israel, y ¿Quién soy yo como para continuare sufriendo los engaños de la mediocridad? ¿Y quiénes son ustedes? Somos nada menos que los Bnei Melachim, los hijos de la realeza, somos los padres y madres de la totalidad de los Judíos que habrán de venir dentro de 1000 años. Con éste yichus y responsabilidad es nuestra tarea el aceptar e interiorizarnos en esto, en nuestra batalla con nuestras malas inclinaciones. Pueda ser que encuentre la interiorización de su realeza y la misma venga a ser un poderoso instrumento con el cual poder crecer y hacer las coas correctas aún cuando ello sea difícil.
Un amigo mío en una oportunidad me dijo que había tenido que tomar una difícil decisión que bien le pudo haber costado su puesto de trabajo. Le habló a un amigo quien, a su vez, le hizo una poderosa pregunta, “¿Qué harías si tuvieses un 5% más de coraje? Tal pregunta hizo que tuviera acceso al coraje adicional que estaba dentro de él con antelación y de difícil acceso al coraje adicional, por causa de sus temores. Renunció a su trabajo antes de que supiese que otra clase de trabajo podría obtener y, por supuesto…..encontró algo mucho mejor y muy rápidamente.
El hacer la correcta pregunta puede cambiar nuestros puntos de vista en un momento crítico de poder tomar una decisión. ¿A qué bisabuelo/bisabuela se compara usted más? Si es Rachel, por ejemplo, cuando se enfrente a una pregunta difícil ¿ qué pregunta le haría usted para poder acceder a más sabiduría, coraje, serenidad, confianza o cualquier rasgo que necesites para prevalecer? Podria decirle, “Rachel, soy tu nieta y estoy en un gran problema¡ Necesito de tu ayuda. Por favor, ruega por mí (una voz se oye en las alturas….Rachel está rogando por su hija….Jeremías 31:14) ruégale al Eterno¡ Ayúdame a tener acceso a tu coraje, a tu emunah¡ “
Este es sólo un ejemplo de un posible paso para poder obtener una solución. Cada padre, madre, profeta y gran líder tiene una o dos características en las cuales él o ella sobresalen. Si esa característica o rasgo es la que necesita, entonces esa es a la que usted debe dirigirse para poder obtener ayuda e inspiración.

CRECIMIENTO EXPONENCIAL

Una vez oí a alguien citar a Arthur C. Clark quien, supuestamente, había dicho (parafraseamos), “La mayoría de los hombres sobrestiman lo que ellos pueden hacer en un año y subestiman lo que pueden hacer en 10 años. La razón de ello es que pensamos en términos lineales (líneas rectas) sin tener en cuenta que el progreso es exponencial.”
He encontrado que éste principio es absoluta y poderosamente una realidad en mi vida. Un esfuerzo consistente y sólido en un tiempo considerable me ha producido un crecimiento intelectual tremendo en logros. Al vencer algunas circunstancias personales muy difíciles, he podido escribir dos libros y publicado más de 20 artículos sobre matemática dentro de mi profesión. Mis habilidades técnicas han crecido exponencialmente con el transcurrir del tiempo, y entre las investigaciones que hice en mis primeros años y que parecieron ser diversas, áreas sin relación la una con la otra, han producido resultados maravillosos cuando mi conocimiento creció; y comencé a ver su relación hasta el día en el que mis investigaciones vinieron a unificarse en un todo.
Un crecimiento exponencial del uno por ciento – lo cual es una rata de crecimiento muy pequeña – en 1000 años hará posible que un (1) dólar aumente a 22000 dólares, mientras que un crecimiento exponencial de menos del uno (1) por ciento convierte ese dólar en casi nada. Un crecimiento exponencial del 10% en un término de 1000 años convierte un (1) dólar en 1043 dólares que podrían ser suficientes para comprar el mundo¡ A todos nosotros nos gusta la perspectiva de grandes negocios, pero es mucho más importante entender el poder de pequeños logros personales y su consistencia.
Es así como un gran esfuerzo en poder hacer pequeños logros en su carácter, ahora, pueden cambiar totalmente al mundo en el término de 1000 años. Su trabajo hará que pueda ser mejor (y mi trabajo el poder ser un mejor Yaakov) y mostrará el ejemplo a sus hijos para que sean mejores personas cuando crezcan (aun si ellos ya son adultos) ¡ Toda la nación Judía dentro de 1000 años, a partir de ahora, quienes vendrán a ser sus bisnietos/bisnietas será tan enorme, tanto en carácter como en riqueza física, basados en su lucha por desarrollar las herramientas necesarias para vencer sus malas inclinaciones y modelar todo esto para bien de sus niños/niñas quienes, a su vez, lo sabrán modelar para los suyos. Os bendigo y me bendigo el que podamos vencer nuestros engaños de mediocridad y sobre lo cual el maligno trata de hacer presa y se interpone en nuestro verdadero papel como Judíos de la realeza. Por supuesto, las malas inclinaciones hacen presa de los arrogantes y debemos estar también en guardia contra ello. En el instante mismo en que nos sintamos arrogantes es el preciso y correcto momento de recordar que también podemos provenir de personas malvadas del pasado.
Los análisis matemáticos precedentes fueron propuestos al Departamento de Matemáticas de la Universidad Hebrea de Jerusalén. Después de un estudio acucioso y de haber sido comprobado y re comprobado sus resultados, la Universidad hebrea de Jerusalén dio a conocer sus propios hallazgos : “Las matemáticas tienen sentido” y “su fórmula que accede a la tesis del estudio nos dicen que los resultados matemáticos y sus logros demográficos son correctos.
Mas sin embargo, claramente existen poblaciones humanas que nunca han tenido co0ntacto alguno con poblacio0nes Judías o sus descendientes. Por ejemplo, tenemos 1) los aborígenes Australianos 2) los pobladores de las Islas del Mar del Sur 3) la gran mayoría de pueblos de Turquía y de las repúblicas del Asia Central 4) los Esqui9males 5) los pueblos Mongoles, Coreanos y Chino 6) y los no menos importantes pueblos aborígenes de la cuenca Amazónica en Suramérica, entre otros.
La Estadística Diferencial debe ser recuperable en las múltiples líneas de descendientes, dada la importante presencia de la población Judía. Entre la primera y más importante de éstas áreas , que han tenido y tienen una alta descendencia Judía, figura la Península Ibérica y aquéllos descendientes que provinieron de los colonizadores tanto de España como de Portugal en América Latina. Por supuesto que se ha estimado que esa masa de personas forzadas a la conversión se dio más en el Reino de Portugal en donde uno de cada cinco personas fue Judío. Dados los modelos de matrimonios efectuados y de la movilidad, debe ser extrapolada la cifra para aquéllos de origen español, El bajo índice hoy día de poblaciones Judías representan a aquél “Remanente de Israel” de que hablan los Profetas en la Biblia. Pero los descendientes faltantes, que éste estudio postula que existen, se deben encontrar en los pueblos Españoles y Portugueses tanto en la Península Ibérica como en Latinoamérica.
Bien se puede predecir que muchos de éstos Bnei ha-Anusim ha-Sefaradim, que en Hebreo quiere decir “los descendientes Sefaradíes procedentes de aquéllos que fueron forzados” tratarán de buscar y retornar su propio papel dentro del Gran Destino de Israel. Y la familia Sefaradí les da su “Bienvenidos a Casa”.

Traducción de J.N. Robles Olarte .
Reimpreso de su original con autorización del Dr. Charles B. Abraham
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